Hoy os traemos este artículo que nos parece interesante compartir con todos ustedes y que os puede servir de ayuda,
1.DUERME Y DESCANSA
Parece obvio que sí estamos cansados, la solución idónea es dormir las horas necesarias, pero lo importante es procurar un buen descanso, para ello la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología recomienda:
-Acuéstate y levántate siempre a la misma hora, incluso fines de semana y vacaciones.
-No intentes dormir hasta que tengas sueño.
-Permanece en la cama el tiempo suficiente, adaptándolo a las necesidades de sueño. Reducir el tiempo de permanencia en la cama sin dormir mejora el sueño, y al contrario, permanecer mucho tiempo en la cama puede producir un sueño fragmentado y ligero.
-Si pasados 30 minutos desde que te acostaste, no puedes dormir, levántate de la cama, vete a otra habitación y realiza alguna actividad tranquila, como leer. Cuando vuelvas a tener sueño regresa al dormitorio.
-Evita la siesta. En casos concretos se puede permitir una siesta de no más de 30 minutos de duración.
-Evita las bebidas que contienen cafeína y teína. Limita el consumo de líquidos por la tarde, sobre todo si la frecuencia urinaria es un problema.
-Ten en cuenta los efectos que ciertos medicamentos pueden tener sobre el sueño. Los estimuladores a la hora de acostarse y los sedantes durante el día pueden afectar de forma desfavorable al sueño.

 

2.TOMA EL SOL MODERADAMENTE.
Puesto que al tener menos horas de sol esto nos provoca cierto “bajón”, hay que aprovechar los momentos soleados para recargar nuestros niveles de serotonina que, como ya hemos dicho, se produce como respuesta a la luz solar. Está comprobado que realizar actividades al aire libre mejorar nuestro estado de ánimo.

 

3.HAZ EJERCICIO.

El ejercicio, además de ser beneficioso para nuestros músculos, corazón y peso, también propicia que nuestro cuerpo genere endorfinas y se libere del estrés, lo cual nos hace sentir mejor. Si hace buen tiempo aprovecha para hacer actividades al aire libre, basta con un paseo de media hora diaria para notar sus beneficios.

4.ALIMENTOS PARA LEVANTAR EL ÁNIMO.
Los nutrientes de nuestra dieta diaria también influyen en nuestra vitalidad, concretamente, si nos sentimos decaídos, tenemos que aumentar la ingesta de:
-Triptófano, que es el aminoácido esencial para que el cuerpo fabrique serotonina por el día y melatonina por la noche. Este nutriente lo encuentras preferentemente en lácteos, huevos, pescados y carnes y en frutas, como el plátano y la piña.
-Hierro, puesto que la falta de este mineral provoca cansancio y mareos, hay que evitar su déficit, consumiendo alimentos ricos en hierro como las legumbres, el marisco y la carne. Si en la misma ingesta consumes vitamina C (un zumo de naranja) el hierro es mejor asimilado por el organismo.
-Hidratos de carbono, que nos aportan la glucosa que el cerebro y los músculos necesitan para su correcto funcionamiento. Mejor si consumimos productos integrales, como el pan o la pasta ya que al ser la digestión más lenta consigue que la liberación del azúcar en sangre sea progresiva evitando picos de glucosa.
-Vitaminas A,B,C Y E, que nos ayudan a mantener el estrés oxidativo a mantener los niveles adecuados de hormonas. Con un consumo regular de frutas y verduras conseguimos los niveles óptimos aunque también podemos consultar con nuestro farmacéutico qué suplemento nutricional sería el más adecuado.

 

5.SIEMPRE POSITIVO
Nuestras ideas son clave en el ánimo y calidad de vida que tenemos, así pues, pensar en positivo, comenzar nuevas actividades y proyectos, buscar tiempo para hacer las cosas que nos gusta y relajarnos, son hábitos muy beneficiosos que nos cargarán de energía y alegría. ¡Anímate a poner en práctica buenos hábitos para superar el bajón invernal!.
El artículo procede del número 75 de la revista Farmacéutico y aprovechamos para dar las gracias a la misma, por artículos como estos.

https://ortopediasejido.com/

La imagen puede contener: 2 personas, personas sonriendo, texto
La imagen puede contener: una o varias personas y exterior