Practicar deporte con tendinitis

La tendinitis es una inflamación de los tendones debido a un esfuerzo o a una repetición exagerada. En los primeros días es importante guardar reposo y seguir el tratamiento del especialista, sobre todo cuando el dolor es más intenso. Pero a medida que los tejidos se van reparando practicar deporte con tendinitis es positivo. Siempre y cuando sea un ejercicio moderado y combinado con fisioterapia.

Al practicar deporte con tendinitis aumenta la vascularización de la zona y mejora la nutrición de los tejidos

Según los expertos, practicar deporte con tendinitis provoca que aumente la vascularización de la zona lesionada. Además mejora la nutrición de los tejidos. Así conseguimos que el dolor disminuya y favorecer la recuperación. Porque cuando la articulación se queda inmóvil surgen rigideces. Al fin y al cabo el daño no suele aparecer solo en el tendón, sino que afecta a los músculos o la vaina sinovial que recubre al tendón. Estas rigideces pueden llegar a provocar la aparición de osteoporosis o atrofia muscular, por ejemplo. A ello se une que esas rigideces o esa atrofia muscular puede retrasar la recuperación.

Para practicar deporte con tendinitis hay que hacerlo progresivamente y protegiendo la zona dañada

Por tanto si tienes tendinitis puedes hacer ejercicio. Pero hay que hacerlo con moderación, siguiendo las indicaciones del médico y del fisioterapeuta para establecer el plan de entrenamiento más conveniente y siguiendo unas pautas:

  • Practicar deporte con tendinitis de forma progresiva. Hay que evitar la intensidad anterior a la lesión, porque puedes agravarla.
  • Busca una actividad no lesiva. La tendinitis aparece por movimientos repetitivos. Por ello puede ser conveniente cambiar el tipo de actividad que se estaba realizando y buscar una que sea menos lesiva. Por ejemplo, con ejercicios en piscina.
  • Variar el entrenamiento. Por ejemplo, si hay dolor al estirar el brazo o molestias por una lesión en el tendón de Aquiles, hay que evitar realizar constantemente los mismos ejercicios. Así evitamos forzar la zona de la tendinitis.
  • Los estiramientos son clave. Hacer deporte beneficia la recuperación y reduce el dolor pero hay que incluir los estiramientos como parte de la rehabilitación. Así ayudamos a la relajación del músculo y reducimos la tensión sobre el tendón.
  • El descanso es fundamental. Los periodos de descanso son tan importantes como los entrenamientos. El cuerpo necesita recuperarse del esfuerzo y más si se va a practicar deporte con tendinitis.
  • Protege la zona dañada. Si vas a practicar deporte con tendinitis es conveniente el uso de ortesis que protejan la zona dañada. Por ejemplo, con la Muñequera semirrígida con férula palmar-dorsal/ Fast Lacing de Orliman permite el libre movimiento de los dedos, mientras realiza una inmovilización funcional de la muñeca y estabiliza las articulaciones del carpo. La muñequera alivia el dolor al estirar el brazo o el producido por el síndrome del túnel carpiano, esguinces, artrosis, tendinitis o sobrecargas. Y si la articulación dañada es la rodilla, Orliman cuenta con una Rodillera con refuerzos laterales flexibles, que da soporte y estabilidad, lo que permite practicar deporte con tendinitis protegiendo la rodilla y a la vez ayudando a su recuperación. O en el caso de una lesión en el tendón de Aquiles, la Tobillera elástica con almohadilla para el tendón de Aquiles y talonera Achillosil ayuda a aliviar la tensión en la zona y permite la práctica deportiva.
  • Cuida la alimentación y la hidratación.

Y, ante todo, al practicar deporte con tendinitis presta especial atención a las sensaciones del cuerpo y como responde al ejercicio. Y ante cualquier aviso parar para evitar forzar y empeorar la lesión.

Fuente Orliman