Prevención de lesiones deportivas

Realizar de forma regular actividad física proporciona numerosos beneficios para la salud. La práctica deportiva es recomendada por los expertos, pero hay que tener en cuenta que este gran aliado puede también jugarnos una mala pasada.

El sobreesfuerzo o la práctica inadecuada de ejercicio aumentan las probabilidades de sufrir lesiones deportivas. El daño puede tener consecuencias a corto o largo plazo, por lo que prevenirlas es la mejor opción.

De esto ha tratado la semana pasada el ‘II Simposio Articulando el Deporte’, organizado por la Fundación Internacional de Pacientes con Artrosis (OAFI), la Fundación y Servicios Médicos del Atlético de Madrid y el Comité Olímpico Español (COE).

El encuentro ha contado con la presencia de reconocidos profesionales del mundo de la medicina, fisioterapia y nutrición deportiva, así como deportistas de alto nivel, que han debatido sobre las claves de un buen entrenamiento teniendo en cuenta todos los puntos intervinientes en la práctica deportiva.

“La prevención empieza desde la infancia. Debemos ser conscientes de la importancia de llevar a cabo una buena condroprotección desde los inicios de nuestra vida deportiva, pudiendo evitar así un gran número de diagnósticos futuros de enfermedades como la artrosis y las lesiones musculares”. Expone el doctor Josep Vergés, presidente de la Fundación OAFI.

Evitar lesiones desde la infancia

Desde la niñez la actividad física empieza a formar parte de nuestra vida, por ello la prevención desde una edad temprana es importante. “Los colegios deberían analizar el morfotipo de los niños y niñas, la carga genética para visualizar antecedentes familiares, y a partir de ahí ponerles a practicar un deporte que le guste, que ayude y no perjudique”. Valora el doctor Vergés.

El experto expone la importancia de evaluar al menor, “si padece pie cavo o un isquio corto porque a lo mejor en el día de mañana tendrá que llevar una prótesis”.

“No es raro ver hoy en día a la gente joven con prótesis porque han coincidido tres factores: la carga genética familiar de antecedentes de artrosis, con alteraciones de morfotipo y con la práctica deportiva de alta competición. Cuando coinciden las tres hay riesgo de problemas osteomusculares”. Añade el especialista.

Lesiones: deporte y psicología

Las lesiones deportivas suelen ser molestas. Estas impiden seguir con la práctica regular provocando dolor y limitación de movimiento. De hecho, hay deportes que son más propensos a hacer sufrir un tipo determinado de lesión.

“Cada deporte tiene su patología. El esquí y el fútbol por ejemplo afecta mucho a las rodillas, el baloncesto a los tobillos, el golf a nivel lumbosacro, el rugby provoca muchas artrosis de hombro, los tenistas codo de tenista, etc. En cada deporte se utiliza más una articulación que otra y esta es la que más sufre”. Comparte el doctor Vergés.

Además, “una lesión puede hacer aparecer estados de ánimo negativos de frustración y ansiedad, afectando de manera directa a nuestra calidad de vida”, informa la OAFI.

“El deporte hace sentir mejor, hay liberación de endorfinas, va bien para el tema cardiovascular, y si te prohíben realizar actividad física estás perjudicando a esta persona. Por ello hay que adaptar la lesión a otro deporte en el que el daño no sea perjudicial”. Recomienda el fundador de OAFI.

Tal y como cuenta el especialista, este es un círculo vicioso: “Si tienes una lesión artrósica que te produce dolor y capacidad funcional que limita realizar actividad física automáticamente tu peso aumenta. Esto puede derivar en diabetes tipos 2, hipertensión o problemas vasculares, por lo que es importante que las personas podamos movernos, porque para eso está hecho nuestro cuerpo”.

“Creo que el que cuida el cartílago cuida el corazón. Muchos hábitos que se recomiendan a nivel cardiovascular son perfectamente válidos para intentar reducir, prevenir o ralentizar las lesiones en el cartílago, es decir, la famosa artrosis”. Destaca el doctor Oscar Luis Celada, médico de la selección española de fútbol.

Las lesiones deportivas más comunes

Las lesiones musculoesqueléticas de las extremidades inferiores son las más comunes en el deporte. Este tipo de patología tiene relación directa con un incremento del riesgo de obesidad y artrosis postraumática.

Según la Liga Iberdrola de fútbol femenino, las deportistas se lesionan hasta tres veces más del ligamento cruzado anterior que los hombres.

Se estima que, tras una lesión importante, solo el 65 % de los pacientes vuelven al deporte previo a la lesión y únicamente el 55 % compiten de nuevo antes de 2 años. Además, el 31 % de estos deportistas de élite puede llegar a sufrir artrosis.

Según analiza J.L. Whittaker en su artículo ‘Un enfoque pragmático para prevenir la artrosis postraumática después de una lesión articular relacionada con el deporte o el ejercicio’. Las lesiones deportivas que suponga un largo plazo de recuperación pueden llegar a desencadenar enfermedades como la artrosis, sobre todo en deportistas profesionales.

El alto nivel de entrenamiento de competición es uno de los mayores factores de riesgo para sufrir una enfermedad: por ejemplo, el riesgo de padecer artrosis es de un 29 % en futbolistas, con la artrosis patelofemoral como la más común. Indican desde la Fundación Internacional de Pacientes con Artrosis.

Pero no solo los deportistas profesionales se ven afectados por este riesgo. En España, cerca de un 43 % del total de la población practica algún deporte.

Un 75 % de ellos realiza ejercicio edificio por su cuenta, al margen de una institución o club que controle la práctica segura de la actividad (Estudio de ‘Deporte de ocio en España: epidemiología de las lesiones y sus consecuencias’).

Por esta razón, la prevención de lesiones deportivas y la promoción de una práctica saludable del deporte es importante.

“Estaremos en forma para hacer fútbol, no haremos fútbol para estar en forma. Una cosa es disminuir al máximo las lesiones y otra cosa es tener muchas más lesiones”. Dice el doctor Ramón Cugat, traumatólogo y presidente de la Fundación García Cugat.

“Hat-trick”, ¿qué se cuece en la traumatología del deporte?

La artrosis es una enfermedad degenerativa articular frecuente, caracterizada por la destrucción del cartílago hialino que recubre las superficies óseas.

El cartílago es un tejido que hace de amortiguador al proteger los extremos de los huesos y que favorece el movimiento de la articulación.

El músculo representa el 45 % del peso del cuerpo y el 12 % es hueso. Entre ambos es el 55 % del cuerpo. El 15 % es la piel, informa el doctor Pedro Guillén, presidente de Clínica CEMTRO.

“¿Hacia dónde va la medicina del deporte?”, se pregunta el doctor. Según sus palabras, esta medicina se dirige hacia un área de entendimiento y restauración que fija su objetivo en aprovechar la célula dañada, “porque la célula es medicamento”.

“En animales hemos logrado regenerar la lesión muscular acortando el tiempo de mutación en más del 60 % en ratones. Creemos que el cultivo celular es una de la hazañas más grandes que hay”. Desvela el doctor Pedro Guillén.

‘Articulando el deporte’ para prevenir lesiones deportivas

La nueva edición del Simposio Articulando el Deporte ha centrado el foco en la importancia de llevar a cabo un deporte saludable y seguro. Con él buscan una solución conjunta a la oleada de lesiones en el deporte profesional y recreativo.

A través de más de 30 ponencias dedicadas a la medicina, la traumatología, la farmacología y la nutrición deportiva, expertos en la materia debatieron y divulgaron sobre la prevención y mejora de la práctica de actividad física para evitar lesiones deportivas.

Fuente Efesalud