Tratamiento de la metatarsalgia

De todas las dolencias que pueden sufrir los pies, la metatarsalgia, es una de las más comunes. Es lo que conocemos como pie abierto. Un dolor que se manifiesta en la planta de los pies, concretamente en el metatarso, la parte que se encuentra entre la zona media de la planta del pie y los dedos. El tratamiento de la metatarsalgia va encaminado a aliviar los síntomas.

Los pies son nuestro principal apoyo, están en constante fricción con el suelo y con el calzado y se llevan la peor parte de nuestro día a día. El metatarso es el punto del cuerpo sobre el que más peso se apoya al caminar o correr. Esto explica que sea proclive a sufrir dolores, inflamaciones y padecer lesiones cuando la sobrecarga es muy grande o el apoyo es defectuoso por algún motivo.

Se recomienda el uso de un calzado adecuado

La metatarsalgia es muy habitual entre los deportistas. Principalmente debido a una mala mecánica en la fase de despegue al caminar o al correr. La elevación de los dedos en este punto inicial de la marcha produce una presión excesiva sobre la cabeza de los metatarsianos que ocasiona dolor e inflamación a cada paso. En el tratamiento de la metatarsalgia de deportistas es importante guardar reposo cuando aparece. O incluso cambiar los hábitos deportivos, por ejercicios de menor impacto.

También es muy común entre las mujeres, debido al uso de un calzado inadecuado, especialmente con excesivo tacón, con poca suela o con una punta demasiado angosta. Por ello, el tratamiento de la metatarsalgia incluye el cambio de calzado. Es recomendable utilizar uno anatómico, ancho y con un tacón que no exceda los tres centímetros. Además, la propia morfología del pie, especialmente si es cavo, la edad y el sobrepeso incrementan considerablemente la posibilidad de padecer esta dolencia.

¿Cuáles son los síntomas?

La metatarsalgia se manifiesta con durezas y callosidades. Y provoca un dolor punzante que puede llegar a ser muy intenso. Esta sensación se acentúa durante la práctica de deportes con gran impacto sobre la planta del pie y, en los casos avanzados, simplemente por el hecho de caminar descalzos.

Para prevenir la metatarsalgia es recomendable mantener una buena forma física, evitar el sobrepeso y practicar ejercicio siempre con un calzado adecuado. Esto significa que debe amortiguar la pisada y distribuir el peso de manera correcta. También es importante acudir a un fisioterapeuta, tanto para prevenir la metatarsalgia como en el tratamiento del pie abierto.

En caso de padecer una alteración mecánica o malformaciones en los pies, es recomendable un estudio de la pisada. También el uso de plantillas, de manera que se consigue reducir los puntos de presión excesiva.

¿Cuál es el tratamiento de la metatarsalgia? Para aliviar los síntomas, además del cambio de calzado, hay que aplicar frío en la zona varias veces al día, antinflamatorios y el reposo. Si no hay mejora, la metatarsalgia puede requerir desde las infiltraciones de corticoides o la inmovilización, hasta la intervención quirúrgica.

Además, existen productos de ortopedia que nos pueden servir de gran ayuda en el tratamiento de la metatarsalgia. Principalmente, para corregir y elevar la posición del metatarso, disminuyendo así el impacto sobre la planta. Es el caso de la Banda con Elevación Metatarsal de Orliman. Confeccionada en tejido elástico y especialmente indicada para el tratamiento de la metatarsalgia y del hundimiento de la bóveda anterior del pie. Se adapta perfectamente a la anatomía en todos los casos y alivia de una manera muy eficaz el dolor, facilitando así la incorporación del paciente a su actividad normal.

Fuente Orliman