Evitar úlceras y escaras

Al prevenir las úlceras por presión, el paciente gana en calidad de vida.

Los profesionales de la sanidad aseguran que aproximadamente un 98% de las úlceras por presión o escaras son evitables. Ahí radica la importancia de prevenir las úlceras por presión. Las úlceras por presión son lesiones que aparecen frecuentemente en pacientes con movilidad reducida o que están obligados a permanecer en una misma postura durante espacios prolongados de tiempo.

Las escaras afectan cada día en España a más de 90.000 pacientes que viven en sus casas, en residencias o que son atendidas en hospitales. Y se estima que el coste de tratar estas lesiones supera los 600 millones de euros anuales. Son datos de Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento en Úlceras Por Presión y Heridas Crónicas (GENEAUPP), quienes advierten, además, que prevenir las úlceras por presión cuesta 1,7 euros al día. En cambio su tratamiento puede llegar a tener un coste de 46 euros diarios.

Prevenir las úlceras por presión se convierte pues en una prioridad en la atención de estos pacientes. Ya sean tratados en sus domicilios, en residencias o en los propios hospitales. Todo paciente encamado o limitado en su movilidad debe ser objeto de una valoración clínica integral y formar parte de un plan de asistencia, prevención, promoción y rehabilitación de la salud. El objetivo es lograr el mayor grado de independencia del paciente, potenciar el autocuidado, la educación del cuidador. Así como una mejora de la calidad de vida en el contexto domiciliario.

¿Cómo aparecen las escaras?

Dentro de los factores intrínsecos hay que tener en cuenta los siguientes aspectos:

  • Estado general de salud. Cuando peor sea, más facilidad para que aparezcan.
  • Nivel de movilidad. Los pacientes con movilidad reducida tienen más posibilidades de sufrirlas.
  • Estados nutricional. Hay que cuidar la alimentación de los pacientes encamados o con movilidad reducida.
  • Edad.
  • Nivel hidratación de la piel. De ahí la importancia de mantener la piel bien hidratada en estas personas.

A ello hay que sumar la presión que realiza el cuerpo sobre la superficie, las fricciones que pueden deteriorar las capas de la piel, así como las condiciones de calor y humedad que haga en la estancia.

Para identificar precozmente signos de lesión es muy importante analizar el estado de la piel. La valoración debe tener en cuenta los signos de sequedad, excoriaciones, eritema, maceración, fragilidad, temperatura e induración. Así como la sensación de picor o dolor, especialmente en el sacro, talones, tobillos, codos y occipucio.

Os recomendamos uso de productos antiescaras como método paliativo y para prevenir las úlceras por presión. La gama de estos productos de Orliman cubre prácticamente la totalidad de las necesidades de estos pacientes. Los productos antiescaras de Orliman favorecen el alivio de la presión y disminuyen la incidencia de aparición de ulceras.

Es posible encontrar un modelo para cada tipo de lesión: cojines antiescaras, almohadas, sábanas, coderas, botas, manoplas, muñequeras y taloneras. Todos están fabricados con tejidos suaves con tratamiento Sanitized y propiedades anti microbianas. No absorbe la humedad, y mantienen la piel siempre seca mejorando la regulación térmica. Además, estos tejidos materiales favorecen un mejor cuidado profiláctico y terapéutico.

Señalar que para prevenir las úlceras por presión se debe prestar atención a estos consejos:

  • Inspeccionar la piel de forma sistemática y mantenerla limpia, seca e hidratada.
  • Hacer cambios posturales frecuentemente.
  • Presta atención a las condiciones de calor y humedad de la estancia.
  • No es aconsejable hacer masaje sobre las prominencias óseas ejerciendo presión, ni tampoco amasar la musculatura. Eso solo se conseguirá debilitar más la piel.
  • Nutrición: el control y valoración de la nutrición del paciente, especialmente en los ancianos, va a hacer que el riesgo de desarrollar ulceras disminuya. Y que en caso de que aparezcan, su curación sea más rápida y con menos complicaciones.
  • Estimula la actividad y el movimiento del paciente. Tanto activo como pasivo.
  • En la higiene diaria utilizar agua tibia y jabones neutros. También usar cremas hidratantes, evitando colonias, alcohol o el talco.

Fuente Orliman